Por Orbis Beltré
El señor Ministro de Interior y Policía ha dicho
que la Marcha Verde es un plan desestabilizador de la democracia.
¿Desestabilizar la democracia? Pues entonces usted,
señor Ministro Carlos Amarante Baret, sería nuestro cómplice. Pues cada una de
las marchas verdes han sido aprobadas previamente por el Ministerio que usted
preside; incluso las rutas de cada una de las marchas han sido trazadas y
aprobadas previamente por Interior y Policía, y nosotros hemos acatado esta
regla, porque es lo legal.
¿Desestabilizar la democracia? No, señor Ministro.
Nuestras marchas han sido muy respetuosas de la Constitución dominicana y del
orden público. Pues han sido marchas pacíficas, con arreglo a la ley.
No hemos quemado una sola goma, no hemos obstruído el
tránsito, no hemos lanzado una piedra contra nadie, no hemos roto ni saqueado
un solo establecimiento comercial...
¡No hemos violado la ley! Pienso, señor Ministro Carlos
Amarante Baret, que quizás esto es a lo que usted le teme. Pienso que a usted le atormenta que nuestra protesta
esté siendo tan civilizada, tan ordenada, tan pacífica.
Quizás, señor Ministro, usted lo que
quisiera es que nosotros, los de Marcha Verde, nos arroguemos las malas
costumbres del Gobierno del que usted es parte, cosa que usted y los suyos
hallen un pretexto para objetarnos, para aplicarnos la ley que ustedes nunca
cumplen, para chubarnos a los descerebrados que pueda haber en la Policía
Nacional, y disuadirnos a macanazos y tiros, para finalmente declararnos
sediciosos.
Un consejo, señor Ministro Carlos Amarante Baret: sea
ciudadano como nosotros los de la Marcha Verde, sea civilizado como nosotros,
para que entienda y comprenda por qué nuestra protesta no es como usted
quisiera que fuera. Nuestra protesta seguirá siendo pacífica, como manda la
ley.
Usted, señor Ministro, con sus ganas de disuadirnos, de
matarnos y de justificar su crimen alegando que estábamos obstruyendo el
tránsito, quemando gomas y saqueando establecimientos comerciales, morirá seco
como el lagarto de Neiba!
La marcha sigue!